Victor David Díaz: "El retiro está en el tapete"

Foto: Elyxandro Cegarra

Sin sonar arrogante, Victor David Díaz se considera una excepción de la regla. No cualquier jugador puede darse el lujo de participar en una liga profesional a los 45 años de edad. Pero allí está, combatiendo los rigores del tiempo, con Gaiteros del Zulia, su quinto equipo en la LPB.

Según explica, varios factores se combinan para que la fecha final de su carrera, que dio inicio en 1987, todavía se desconozca. Va desde la genética hasta la alimentación, pasando por ética de trabajo. “Tengo que darle las gracias a los genes de mis padres. También está relacionado con la comida en la infancia y adolescencia, además de evitar los excesos. Llegué en el momento cuando empezaron a salir las merengadas nutritivas, junto con Heberth Bayona y Kenji Urdaneta nos hemos dedicado a explorar el mundo natural. A todos nos gusta la fiesta y, de vez en cuando, tomarnos unos tragos, pero todo en exceso es malo. Soy una excepción de la regla, pero no me creo ese cuento, sigo trabajando”, enumeró el alero.

Obviamente, Díaz no es el mismo que entre 1994 y 2002 promedió, al menos, 20 puntos por partido. Ahora su rol es otro. Le toca salir de la banca y cumplir con una función específica. Después de 21 encuentros promedia 1.5 puntos en 5.7 minutos en cancha. La situación hace que en muchos de los escenarios del país escuche: “¡Retírate que estás viejo!”. “Cuando un fanático te grita eso y lo tomas personal, es el momento de colgar las cuerdas. Si fallas un tiro, estás viejo; de lo contrario, eres bueno. Es una balanza muy fina y debes estar equilibrado. Mi abuelo decía algo que nunca olvido: ‘que hablen bien o mal, pero que lo hagan’. La pregunta del retiro me la hacen diariamente”, confesó el tres veces Jugador Más Valioso.

El caraqueño afirmó que sigue “viviendo el día a día”, pero admite que el momento de colocarse detrás de las rayas “está en el tapete”. “Se han hecho ajustes para vivir después del baloncesto después de todo, ya sea en un parte gerencial o técnica. Nunca podría desvincularme de esto”, agregó el líder en puntos vitalicio del circuito nacional.

Díaz ha visto varias generaciones de basqueteros pasar por los tabloncillos criollos y se atreve a realizar comparaciones con la actual. “No hay mucha diferencia, pero una es clave, que la he escuchado de muchos jugadores y lo estuve comentando con Kenji en estos días. Antes los jugadores se respetaban más, ahora los jóvenes no tienen esa creencia. Yo llegué a la Liga respetando a Yván Olivares, Sam Shepherd y Gabriel Estaba. Muchos piensan que, como no son de esta generación, no tuvieron antecesores. Deben entender que están aquí porque otros abrieron camino”, exhortó.

El escopetero, quien ha participado en 1057 compromisos, se retira del banquillo donde fue realizada la entrevista. Sigue su camino al camerino, allí lo esperan el resto de sus compañeros que, en algunos de casos, ni siquiera habían nacido cuando él ya empezaba a hacer historia.

Publicado en el diario Meridiano el jueves 11/4/2013