Foto: USC Men's Basketball |
Aunque
Michael Carrera diga que fue un juego normal, como cualquier otro, no fue así.
Es poco común que dos venezolanos se enfrenten en la NCAA, y ocurrió apenas por
tercera vez el pasado miércoles, cuando los Gamecocks de South Carolina
recibieron a los Rebels de Mississippi.
Ocurre
con tan poca frecuencia que, antes de esta temporada, solo una vez les tocó a
dos nacionales enfrentarse. El encuentro data de 2009, cuando David Cubillán,
representando a los Golden Eagles de Marquette rivalizó con Gregory Echenique,
quien en ese momento vestía la camiseta de los Scarlet Knights de Rutgers. El
segundo cotejo se escenificó el pasado dos de diciembre, siendo Deninson
Rodríguez (Panthers de Georgia State) y Juan Coronado (Flames de Liberty) los
protagonistas.
El
encuentro de hace un par de días enfrentó a Carrera y Anthony Pérez, cuya
proyección los coloca entre los mejores prospectos nacidos en el país. El
primero terminó con la mejor parte, ya que labró doble-doble de 13 puntos y 13
rebotes; además, South Carolina venció 63-62 a Ole Miss.
“Fue
un honor jugar contra él. Hablamos durante el saludo previo al encuentro y le
alcancé a decir: ‘Te deseo suerte y nos vemos en la selección’”, aseguró el
anzoatiguense a través del hilo telefónico.
Pero
su cordialidad terminó en el mismo momento que el árbitro lanzó el balón al
aire. “Fuera de la cancha soy amigo de todos, pero dentro de ella no soy amigo
de nadie. Desde el salto entre dos, Anthony pasó a ser el jugador de otro
equipo. Cuando estuvimos los dos en cancha hablé mucho, una especie de ‘trash
talk’ (Lenguaje basura para sacar de concentración al rival). No pudimos hablar
después porque mis padres están acá y me tuve que ir”, sonrió el anzoatiguense.
El
alero fuerte registró su quinto doble-doble en la primera campaña como jugador
del baloncesto universitario estadounidense. Su promedio de puntos y rebotes es
de 10.5 y 7.3, respectivamente.
Por
su parte, Pérez jugó únicamente siete minutos, 20 menos que su paisano.
Terminó
sin puntos y con dos rebotes. El cumanés, contrario a Carrera, ha tenido un rol
secundario en la universidad durante su año de novato. Los 7.0 minutos que
promedia por juego se deben a la presencia de jugadores más experimentados en
el puesto de alero. Según Sergio Rouco, asistente del director técnico Andy
Kennedy, el año entrante subirá drásticamente su tiempo en cancha.
Publicado en el diario Meridiano el viernes, 22/2/2013
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