Foto: AVS Photo Report |
Hay que estar atentos a los discursos de Julio Toro. En cualquier instante suelta una frase que deja atónita a la audiencia, así esté conformada por jugadores o periodistas. Sus oraciones no pasan por debajo de la mesa.
Durante la final 2012, al mando de Trotamundos de Carabobo, calificó a sus jugadores de “vírgenes quinceañeras”, después de una paliza propinada por su actual equipo, Marinos de Anzoátegui. Más reciente, para explicar por qué envió a la banca a dos de sus jugadores en el Acorazado Oriental, dijo: “No estaban en el arco iris de la prosperidad”. Las expresiones de este tipo abundan en el verbo del puertorriqueño.
Durante la final 2012, al mando de Trotamundos de Carabobo, calificó a sus jugadores de “vírgenes quinceañeras”, después de una paliza propinada por su actual equipo, Marinos de Anzoátegui. Más reciente, para explicar por qué envió a la banca a dos de sus jugadores en el Acorazado Oriental, dijo: “No estaban en el arco iris de la prosperidad”. Las expresiones de este tipo abundan en el verbo del puertorriqueño.